Escaldar y pelar tomates

  1. Hervir agua en una cazuela y retirar del fuego
  2. Sumergir los tomates en el agua unos 45 segundos más o menos para que se reblandezca la piel 
  3. Sacar y ayudandonos de un cuchillo retirar la piel.
  4. La piel sale simplemente tirando de ella con suavidad.